Una cosa es que un ministro haya dado una respuesta evidentemente torpe sobre sus responsabilidades y otra, muy diferente, es que esa respuesta torpe pase de ser un hecho noticioso a una campaña en contra de una figura pública.
Y es que eso de que en Panamá no hay huecos es una burla a la población, por lo que ese ministro debería estar de rodillas pidiendo perdón a todos los panameños en cada hueco que exista, pero también es una burla que las televisoras lleven 4 días con el mismo tema en tono igual de burlesco y sarcástico que el del ministro al que tanto critican.