La parálisis cerebral miclónica (sacudidas musculares involuntarias cortas que se originan en el sistema nervioso), que padece no es impedimento para que desee un trabajo con el cual pueda mantener a su esposa y sus dos hijas.
Todas las noches espera pacientemente, en su silla de ruedas, a que la gente se apiade de su situación y le deposite una moneda en su lata.





