Los padres del niño británico Ashya King declararon en Sevilla, sur de España, tras ser puestos en libertad el martes en la noche en España, que le sacaron del hospital de Inglaterra donde estaba siendo tratado de un tumor cerebral por amor hacia él y para evitar que quedara como un vegetal.
Brett y Naghmeh King fueron detenidos el sábado en Málaga, España, a raíz de una orden de búsqueda y captura emitida por el Reino Unido con la acusación de secuestrar a su hijo.