Según algunos autores, a partir de los 6 meses, se considera que un niño sufre insomnio si al menos dos veces por semana necesita más de 45 minutos para quedarse dormido, o si se despierta totalmente al menos una vez por semana, durante la noche, sin poder dormirse de nuevo.
Insomnio por hábitos incorrectos
Es el más frecuente en niños pequeños. Se estima que alrededor del 30% de la población infantil lo sufriría en algún grado.