Hasta un 70% pueden estar muriendo los manglares de la bahía de Panamá, situación que pone en peligro la mayoría de las edificaciones cerca de las costas ante un fenómeno natural.
Los impactos de la intervención humana y de fenómenos ambientales que modifican los ecosistemas costeros tropicales afectan sus funciones regulatorias y socioeconómicas, aseguró Omar López, secretario técnico del sistema de investigación de Senacyt.





