"Ellos tienen ganas de estudiar y eso lo dejan claro cuando caminan dos horas para llegar a la escuela", dijo Maribel González, directora de la escuela Bajo Bonito, en el corregimiento de Cacao, distrito de Capira.
La familia Rodríguez García formada por el papá, la mamá y nueve hijos, es un claro ejemplo de los deseos de salir adelante pues, además de vivir en condiciones precarias, en donde la pobreza golpea su puerta, sus vástagos deben caminar hora y media para llegar al plantel de enseñanza. Su comunidad se llama Hierba Buena.





