Las obligaciones diarias hacen que las personas tengan estilos de vida acelerados. Las múltiples responsabilidades son propias de nuestros días, crean estrés y ansiedad, por los retos de poder cumplir con cada una de las responsabilidades.
Es por esto que la inestabilidad emocional que se manifiesta a través de enfermedades como el estrés, la depresión y otras dolencias, es cada vez más común.
Además, se han subestimado los trastornos emocionales, porque no relacionan enfermedad emocional y otras condiciones de salud.