Se dice que hace muchos años hubo una guerra entre los mamíferos y las aves.
El murciélago era tan cobarde que cuando estaba con los mamíferos plegaba sus alas y se hacía pasar por ratón. Y cuando estaba con las aves, desplegaba sus alas y se hacía pasar por pájaro.
Hasta que un día lo descubrieron ambos bandos y desde ese día, el murciélago se vio obligado a salir solo de noche, ya que nunca más tuvo lugar ni con las aves ni con los mamíferos.