Londres/AP. El primer ministro británico, David Cameron, descartó ayer un boicot a los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi, diciendo que asistir a la justa en 2014 en Rusia es una mejor manera de hacer frente a los prejuicios contra los homosexuales.
Cameron respondió a una carta del actor y escritor británico Stephen Fry, quien pidió que las Olimpiadas ya no se organicen en Sochi por una nueva ley rusa que prohíbe la ``propaganda de las relaciones sexuales no tradicionales'' e impone multas a los que encabezan manifestaciones del orgullo gay.