Helen Thomas, la irrefrenable corresponsal de la Casa Blanca que aprovechó su sitio en la primera fila de la historia estadounidense para pedirles cuentas a nueve presidentes, falleció el sábado a los 92 años.
Muriel Dobbin, amiga de Thomas, dijo que la pionera en la participación de mujeres en el periodismo murió el sábado por la mañana en su apartamento en Washington. Dobbin informó que Thomas llevaba mucho tiempo enferma, con ingresos frecuentes al hospital, y había vuelto a casa el jueves.