Un león desgastado por los años e impotente ante su enfermedad, yacía en la tierra a punto de morir.
Un jabalí se precipitó sobre él, y vengó con un golpe de sus colmillos una herida mucho tiempo atrás recibida.
Poco después el toro con sus cuernos lo corneó como a un enemigo.
Cuando el asno vio que la bestia enorme podría ser atacada impunemente, él lo pateó en su frente con sus talones.