Ella se hace la vístima, vístima...
Ay, de la luchona no quedó nada. Apenas se quitó las extensiones se le fue lo empoderada, lo empresaria, lo guerrera. Y es que ahora que ejerce como sirvienta pública se la pasa como "Juanita la Huerfanita", tirando vístima que da miedo. Usted la ve por allí como alma en pena, triste, cabizbaja e insegura; solo le falta meter la cabeza debajo del ala del máximo de máximos de Panamá. Pero no coma cuento, ella sabe lo que hace, lo que pasa es quiere pasar agachada de todas las críticas. Dicen que eso también forma parte de su protocolo. ¡Fluye, fluye!
Las momias 'taban cogías en culillo
Nadie puede con Dios ni con las pruebas, así se decían las momias de un canal de televisión cuando el "maleducado" y malhablado sacó su ficha y los puso en jaque mate para que lo sacaran de sus bocas. ¡Ay, prima! Con ganas de seguir lamiéndole las botas a los de arriba se la dedicaron por varios meses; hablaron pestes, lo pusieron como el más ignorante y al final tuvieron que meterse la lengua, ustedes saben por donde. Le dijeron a Chuchezka que este podía bebérselos en chicha con un solo post por vendidos. ¡Ups!
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Amigo el ratón del queso y se lo come
¡Sooo! Así mismito como canta Sandrita. Entre tanta clase de meneo sucio, pata pa' aquí, pata pa' allá quedó contratado como surtidor oficial de mantenimiento. ¡Qué, qué! Dicen que él ejerce su segunda profesión mejor que la primera, por lo que ella lo contrató de inmediato. Y como él está falta de platita, no le negó el favorcito a su amiguita que tiene a su fulito bien lejos.