Una expresión clásica que decimos cada vez que dormimos es que caemos o estamos en los brazos de Morfeo, el dios de los sueños en la mitología griega.
Y es que dormir es una de las conductas más placenteras que realizan las personas cada día, pero sobretodo es una de las funciones vitales para mantener una vida saludable, y esto depende de dos factores importantes: la cantidad y calidad del sueño.
Sin embargo, en la actualidad ambos factores suelen ser incumplidos por muchas personas. El ritmo acelerado de la vida, debido a las responsabilidades, ha ocasionado alteraciones de sueños en la población mundial, adultos, jóvenes, ancianos y niños se han visto afectados por no poder dormir satisfactoriamente. Pero, qué pasa cuando sucede lo contrario, es decir, ¿dormir más tiempo de lo recomendado es perjudicial?
La respuesta, según estudios recientes, indica que dormir demasiadas horas puede ocasionar daños a la salud igual o peores que dormir menos horas de las recomendadas.
El estudio, elaborado por expertos de la Universidad de Keele, en Staffordshire, Reino Unido, encontró que las personas que duermen más de diez horas diarias de forma habitual tienen hasta un 56% de mayores posibilidades de morir a causa de un infarto, y 49% más riesgo de fallecer por enfermedad cardiovascular.
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La investigación agrega que dormir demasiado tiempo cambia la producción de sustancias químicas cerebrales como la serotonina o la dopamina, que pueden provocar depresión.
Según el Instituto Europeo del Sueño las personas que duermen más de 10 horas pasan el día soñolientas y tienden a desarrollar enfermedades crónicas.
Especialistas en trastornos del sueño aclaran que dormir más de 8 horas eventualmente no implica riesgos importantes para la salud, pero si esto se convierte en un hábito y te despiertas aun con sueño, es mejor consultar al médico porque puede haber un problema llamado hipersomnio.
Sueño que hace daño
Presta atención a algunas razones por las que es mejor no dormir más de 8 horas:
1. Dormir en exceso incide en el estado de ánimo, por eso alteraciones como la depresión están relacionadas con el sueño
2. Aumenta el riesgo de desarrollar diabetes porque, al dormir demasiado, se elevan los niveles de azúcar en la sangre.
3. Incrementa el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares que en la actualidad son la principal causa de muerte en el mundo.
4. El sueño prolongado afecta la concentración y la correcta actividad del cerebro en nuestra rutina diaria.
5. Produce alteraciones metabólicas porque se hace menos actividad física y se alimentan fuera de los horarios correspondientes.
Horas de sueño recomendadas
Siempre se ha dicho que lo ideal es dormir 8 horas, sin embargo; expertos aclaran que lo mejor es hacerlo de acuerdo a la edad. Aquí las indicaciones:
1. Recién nacidos (0-3 meses): lo ideal es que duerman entre 14-17 horas cada día, aunque también es aceptable que lo hagan entre 11 y 13 horas. Lo que no se aconseja es dormir más de 18 horas.
2. Bebés (4-11 meses): se recomienda que duerman entre 12-15 horas. También es aceptable que descansen entre 11 y 13 horas, pero nunca más de 16 o 18 horas.
3. Niños pequeños (1-2): no es recomendable que duerman menos de 9 horas y más de 15 o 16.
4. Niños en edad preescolar (3-5): entre 10-13 horas sería lo adecuado. Los expertos consideran que menos que 7 y más de 12 no sería aconsejable.
5. Niños en edad escolar (6-13): lo recomendable sería dormir entre 9 y 11 horas.
6. Adolescentes (14-17): el rango de sueño aumentó en una hora a 10,08 horas (antes era entre 8,5 y 9,5)
7. Adultos más jóvenes (18 a 25): entre 7-9 horas, y no menos de 6 ni más de 10-11.
8. Adultos (26-64): dormir entre 7 y 9 horas, aunque no siempre se logra.
9. Adultos mayores (de 65 años): lo saludable es descansar entre 7-8 horas al día.
Recomendaciones de los expertos para conciliar mejor el sueño:
1. Mantener un horario, incluso los fines de semana.
2. Practicar una rutina para dormir relajado.
3. Hacer ejercicio físico a diario.
4. Asegurar condiciones ideales de temperatura, ruido y luz en el dormitorio.
5. Dormir en un colchón y con almohadas cómodas.
6. Evitar el alcohol y la cafeína en horas de la tarde.
7. Apagar los aparatos electrónicos antes de acostarse.