Las autoridades de Aduanas en la provincia de Chiriquí decomisaron 247 piezas de madera de roble que eran transportadas sin los permisos correspondientes en un vehículo contenedor en el sector de Limones, en Renacimiento.
Las tucas decomisadas fueron halladas en un área fronteriza entre Panamá y Costa Rica y no se descarta que las mismas provengan del hermano país.
Según los primeros informes, la madera retenida, por presuntamente tratarse de roble de contrabando, tiene un valor de unos 3,500 dólares debido a que el pie cúbico tiene un precio en el mercado de 75 centavos.
El decomiso se dio por parte de unidades del Servicio Nacional de Fronteras Senafront, la madera quedó a órdenes de Aduanas.