Por años, los habitantes de la comunidad de El Cortezo, en Tonosí, provincia de Los Santos, han esperado la rehabilitación total del puente sobre el río Guaniquito, el cual tiene más de 70 años de haber sido construido, y aún es de tablones.
Se trata de una región meramente agrícola y ganadera, cuyos habitantes deben atravesar la peligrosa estructura para transportar sus cosechas de maíz y arroz, y trasladar el ganado que comercializan.
Los moradores aseguran sentirse abandonados, ya que, a pesar de las promesas, el puente continúa en mal estado, a simple vista es posible observar los tablones podridos y los hierros corroídos.
Vecinos del lugar exigieron al Gobierno la construcción de un nuevo puente, moderno y seguro, que les permita transportarse de forma segura sobre este río y poder comercializar sus productos, que es la única forma de subsistencia.