Las fuertes lluvias que se registraron en Penonomé y que ocasionaron la crecida del río Zaratí no permitieron que el Idaan continuara con los trabajos en la toma de agua que está llena de arena y otros sedimentos, lo que provocó la suspensión del servicio de agua, afectando a unas 80 mil personas.
Ayer, en horas de la mañana, el Idaan informó que la crecida del río Zaratí llevó sedimento, arena y piedras a la toma de agua, por lo que se suspendió desde tempranas horas el servicio de agua potable.
Sin embargo, el río subió el nivel del caudal y no permitió que se realizaran trabajos y el Idaan los suspendió.
Ahora hay que esperar unas 24 horas más para poder restablecer el servicio de agua potable.
Los penonomeños están desesperados y tratan de recoger agua cuando pasan los carros cisterna.
María Aguilar trabaja en un restaurante y asegura que si no reciben el agua potable, ellos no trabajan y eso significa pérdidas porque no recogieron agua.
Douglas Barrera, director regional del Idaan en Coclé, dijo que lamentablemente la naturaleza no los acompaña y por ello no han podido sacar el sedimento de las fosas, por lo que esperan que baje el nivel del río.
