@castillodelvin
La situación no es fácil para los arrendatarios del Mercado Agrícola Central, o de Abastos, como es conocido popularmente, por la poca vigilancia que hay en el lugar.
Según los afectados, la vigilancia es escasa y a las unidades de la Policía Municipal nadie les hace caso.
Isauro Batista, quien tiene su puesto en el abasto, ya no soporta que las ventas hayan bajado en un 70%.
Añadió que los clientes, por temor a llegar al lugar, se han ido a comprar a otros lados, como La Chorrera, en especial los asiáticos, quienes eran los que más frecuentemente adquirían sus productos para la venta en sus tiendas.
De igual manera, Ariel Sánchez, otro arrendatario, sostuvo que los antisociales siguen entrando al lugar y no hay un sistema estricto que acabe con la situación, lo que les genera pérdidas, pues por día y con mucho esfuerzo se hacen unos $50.
En tanto, Abraham Ovalles, quien también se gana la vida en el mercado, indicó que se ha mejorado un poco la vigilancia, tras los incidentes registrados en los que un chino mató a un maleante que le iba a robar.
Por su parte, el alcalde de la ciudad de Panamá, José Isabel Blandón, manifestó que la seguridad ha mejorado significativamente después de las medidas que han tomado en conjunto la Policía Nacional (PN) y el Municipio.
Explicó que la vigilancia fue triplicada a nueve policías municipales, además reciben el apoyo de las unidades de la PN, quienes hacen constantemente rondas en el lugar.
Otros comerciantes señalaron que han tenido que quedarse con los contactos de los chinos y llevarles la mercancía afuera del mercado, ya que temen ingresar a las instalaciones. Los afectados piden que esta situación se arregle para que sus ingresos mejoren.