El viaje de vacaciones, por el receso escolar, al que Mirta Salinas Jiménez envió a sus hijas desde Tolé, Chiriquí, hasta Panamá, donde pasarían unos días con su padre, no fue de felicidad como las niñas se lo imaginaban.
Ellas fueron engañadas por un hombre, quien prometió ayudarlas y lo que hizo fue llevárselas para su casa, ubicada en Rana de Oro, Pedregal, donde se conoció que incluso abusó de la más grande, de 14 años.
La tragedia de las hermanitas se empezó a tejer desde que su madre las envió solas en un bus de la ruta Panamá-David para que se encontraran con su padre, Bernardo Pinto, en la Terminal Nacional de Transporte de Albrook.
Sin embargo, esto no ocurrió, y no fue hasta la tarde de este martes que la policía dio con el paradero de las niñas y del hombre que se las había llevado.
Alertas
Luis Torres, de la Asociación Nacional de Usuarios de Transporte Público, manifestó que la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre ATTT debería regular la movilización de menores de edad solos en los buses.
Advirtió que los papás no se pueden confiar de enviar a sus hijos solos porque las cosas ya no son como antes, pues los tiempos han cambiado.
Añadió que muchos padres y madres trabajan, algunos no tienen para pagar busitos colegiales, por eso los pequeños viajan solos a las escuelas.
En tanto, Rafael Reyes, presidente de la Cámara Provincial de Transporte, expresó que habría que analizar el transporte de menores de edad sin sus padres en el transporte público.
Según Reyes, se podría aplicar un sistema similar al que utilizan cuando los menores de edad van a viajar al exterior del país.
El dirigente transportista dijo que hoy tiene una reunión en Santiago de Veraguas con transportistas, con quienes abordará el tema de transportar menores de edad sin el acompañamiento de sus padres o un adulto responsable.
Ya están con papá
Bernardo Pinto indicó a día a día que se encontraba con sus hijas. Ayer estaban en el doctor, donde les estaban realizando un chequeo médico. Dijo que el individuo que se llevó a sus nenas, al parecer, abusó de la de 14 años. Indicó que era la primera vez que las niñas viajaban solas a Panamá.
Pinto tiene cinco meses de vivir en la capital. Él emigró en busca de trabajo para ofrecer una mejor calidad de vida a su familia.