El rapero estadounidense Killer Mike fue detenido el pasado justo después de haber ganado tres Grammy en la 66 edición de esos prestigiosos galardones, cuya gala previa, en la que fue premiado, se celebró en el teatro Peacock de Los Ángeles.
Tras esto, se habló de que la detención del rapero se debió a un altercado en el recinto, sin embargo, Mike rompió el silencio sobre el incidente y aseguró que todo se trató de un malentendido con un guardia de seguridad “demasiado celoso”.
“Quiero señalar que anoche mi equipo y yo recibimos varias llamadas de fans y colegas preocupados que querían saber si estaba bien. Agradezco enormemente la preocupación y el apoyo, pero estoy mejor que bien. Como pueden imaginar, estaban pasando muchas cosas y había cierta confusión sobre por qué puerta debíamos entrar mi equipo y yo. Nos encontramos con un guardia de seguridad demasiado celoso”, explicó el músico en un comunicado que fue compartido a la prensa estadounidense.
“Mi equipo y yo confiamos plenamente en que al final quedaré libre de toda culpa. Hasta entonces, sigan escuchando Michael y sigan persiguiendo sus sueños”, dijo el rapero de 48 años.
La policía informó que Mike fue detenido tras el incidente y acusado de un delito menor. Sin embargo, fue liberado la noche del domingo bajo su propia responsabilidad y está programado para comparecer ante el tribunal el 29 de febrero en Los Ángeles.