El maquinista del tren accidentado en Santiago, Francisco José Garzón Amo, habló por teléfono con el interventor mientras el tren circulaba a 199 km/h hasta once segundos antes del accidente y escuchó entretanto un aviso que indicaba la proximidad del tramo con un límite de 80 km/h.
En el accidente, que tuvo lugar en la noche del 24 de julio, fallecieron 79 personas.