Sin saber hacia dónde era llevado y en medio de los nervios, trataba de mantener la calma, pues en ese instante pasaba por su mente la idea de que si lo hubiesen querido matar, ya lo hubieran hecho.
Miguel calcula que aproximadamente a las 5:15 a.m. el camión llegó hasta Juan Díaz; él piensa que el conductor sabía manejar equipo pesado, pues además iba a mucha velocidad.